Mercedes Baudes de Moresco

Las Huellas de la Luz

Las técnicas actuales de preparación al parto tienen antecedentes.En épocas anteriores ,las mujeres se preparaban desde la infancia y adolescencia ,a través de la tradición histórica develada por las mujeres de la familia y en su comunidad.Los juegos infantiles ,las muñecas,la casita,los vestidos del bebe,etc siempre aportaron elementos fantasiosos y educativos ,anticipatorios de la maternidad.

Hoy dia,la mujer ,además de procrear,tiene que producir.

Pertenece a un mundo diferente donde ella comparte el acceso a la producción de bienes ,a la cultura  y a todo un cambio de sistemas,incluido el familiar ,al que debe adaptarse.Asi ,ella reúne los antiguos marcos de la trayectoria familiar y su herencia ,con los logros de la civilización, debiendo articular la función materna con sus realizaciones vinculadas a la producción personal que, a la vez, implica restricciones a la maternidad.

En un embarazo ,ante la llegada de un hijo, hay perdidas de privilegios y asunción de nuevas responsabilidades:

Hay quienes disfrutan de su embarazo.

Hay quienes temen su embarazo.

Hay quienes hablan de su sexualidad.

Hay quienes solo pueden comer.

Es que la mujer inaugura con su cuerpo un momento de cambio que modifica las relaciones con la gente ,con todo su entorno,empezando por la madre,el marido,los niños(propios o ajenos),los hombres y la mujeres en general. Se establece asi una dialéctica de adaptación y rechazo del propio cuerpo,que también va a relacionarse con lo que ese embarazo represente para ella:el deseo de un hijo,la repetición de otro embarazo o parto o aborto,etc

Hablar de cuerpo es adentrarse en un tema muy complejo.El cuerpo es una realidad reveladora y a la vez misteriosa ,que habla por sus síntomas callando sus orígenes.Cuerpo que es presionado por condicionamientos sociales,culturales ,y hasta higiénicos desde el momento del nacimiento y que lo van conformando a la vez que deformando.El cuerpo,que inaugura un circuito de deseo,nos es también extraño,en cierto modo.Por lo tanto ,los cambios provocaran siempre un desequilibrio(recordemos la adolescencia),a la vez que sorpresas ante el reconocimiento del cambio mismo.La transformación corporal es previa al reconocimiento de los cambios.

La mujer crece entre modelos femeninos con los cuales se identifica y recorre las travesias de sus años primeros y de la adolescencia después,haciendo acopio de discursos familiares ,de novelas tejidas entre todos ellos ,a las que agrega su propio estilo y creación .Asi llega a la maternidad con una historia única ,particular y en muchos aspectos absolutamente desconocida para ella misma,donde,hasta la actitud postural que adopta con su cuerpo ,viene con su historia y sus nostalgias.

El comienzo del embarazo está marcado por la ambivalencia entre la intimidad de la gestación y el extrañamiento de vivir tal hecho.

Tiene a veces un carácter “siniestro” ,entendiendo por ello esta mezcla de sentimientos raros y a veces angustiantes.Ademas es un lugar,el del feto,por el que ella transitó alguna vez ,y es desde ahí que la relación con la propia madre se pone en juego de un modo diferente:será a su vez MAMA.

Aun en los mejores casos siempre le costará aceptar su nuevo estado,que no quiere decir que se rechaza al bebe,esto es entenderlo de un modo muy superficial,sino  como acomodarse al pensamiento de ser madre que es muy diferente a rechazarlo.Pensamiento que además se dirige inconcientemente en especial a la relación con su progenitora.

Los trastornos del comienzo de la gestación ,como la hipersomnia,las nauseas,los vómitos,se relacionan con los cambios orgánicos y hormonales a los que se une la sensación de incógnita y el intento de dominar ansiedades y temores.

Se ha hablado mucho de los sueños típicos de la embarazada,las sensaciones de terror por el peligro de abortar,sus diarreas y constipaciones y las percepciones inconcientes del proceso de formación de la placenta.Pero nada es más impactante para la futura mama que la percepción de los movimientos fetales frente a los que puede reaccionar por medio de la negación ,de la confusión ,de la proyección ,defendiéndose de muchas maneras ante la noción de dar vida(y ceder parte de ella )y el temor a la muerte propia y del bebe.

Las fantasias inconcientes que provoca todo embarazo no pueden generalizarse,sino circunscribirse a la historia personal de cada mujer ,que hará en cada caso,una novela particular.Aqui son fundamentales los sentimientos de protección que pueda recibir de su entorno familiar,especialmente del marido y de la madre,ya que la reactivación de las vivencias en relación a cuando era bebe cobran un primer plano.En cuanto al padre del niño,es una manera de que participe desde el principio en el embarazo preparándose también para la llegada del hijo.Este hombre no es un extraño(en el mejor de los casos)y el bebe será de los dos.

A medida que el embarazo avanza ,también las ansiedades y los temores van cambiando,pero el temor a la muerte propia o del hijo ,a las malformaciones fetales,(aunque ahora pueda saberse con anticipación sobre las mismas),al dolor en el parto ,etc aumentan la situación de crisis,crisis como desajuste frente a una situación nueva que no puede resolverse ni evitarse con los recursos habitualmente empleados .Por eso puede considerarse ,en algunos casos como  una enfermedad y un padecimiento que finalizara con terribles dolores en una riegosa intervención.Se olvida asi que embarazo y parto son episodios normales de la vida procreativa femenina y que hay una interrelación constante entre procesos biológicos y psicológicos donde muchos de los dolores ,dificultades y angustias ,provienen de conflictos psíquicos ,(la identificación con otras mujeres y preconceptos)más que orgánicos porque cada mujer desarrolla un caudal propio de sentimientos concomitantes al embarazo.

Dar a luz implica en diferentes marcos culturales pensamientos diversos y preconceptos múltiples,pero siempre se manifiesta una ambivalencia entre el cumplimiento de un deseo poderoso y la representación de un peligro que debe ser evitado.Por eso habrá siempre temores frente al parto,irracionales,inconcientes ,además de los declarados.

Es el “examen final” al que la mujer arriba y al que se arriesga y al que se agrega la futura separación del bebe que durante nueve meses se gesto.No hay duda que es la culminación de la vida psicosexual de la mujer  que madura con ello toda una preparación de su vida entera femenina,pero sufre una regresión parcial durante  el embarazo,favorecida por angustias en relación a la ligazón materna ,a su apego,sometimiento y rechazo.De allí que nos son familiares las conductas regresivas e infantiles de las embarazadas en general.

Como cada renuncia tiene sus consecuencias,dar a luz también implica renunciar,aunque esta renuncia va a compañada por el mayor sentimiento de felicidad y completud.La mujer busca identificarse con un ideal de madre ,un hijo bien protegido por ella ,y vivir asi la unión mas intima que puede existir entre dos seres,pero también puede encontrarse la actitud contraria ,la inseguridad ,la extrañeza,el desapego y la desilusión.

Como no podemos modificar nuestra propia infancia ni los avatares de nuestra constitución como sujetos,ni la mejor madre podrá ahorrar a su hijo ciertas frustraciones ,y justamente es mejor asi.

Cierta vez una mujer le pregunto a Sigmund Freud como debía hacer para asegurarse de criar bien a su hijo ,y Freud le respondió :”Sra ,haga lo que haga se equivocará”.

La falla de los padres es lo que permite a los hijos  separarse de ellos.Desear un hijo,concebirlo, gestarlo y luego dar a luz,es un proceso que comienza con la historia de los futuros padres.La participación activa del padre del bebe ,incluido y no excluido del proceso aseguran mejor preparación para el parto,que no se limita a entenderlo como evitar el dolor o conseguir mejores resultados.

La experiencia más trascendental que puede atravesarse:dar vida a un hijo,por su misma importancia,siempre ocasionara algún desajuste .Quedara en cada una  comprobar que, la irrupción de orgullo y la felicidad que depara, bien vale ,no solo el intento sino su repetición .

Mercedes Baudes de Moresco